24 octubre, 2008

Espacio Familiar TORRECHICLÁN 2008

Durante los meses de julio y agosto se ha llevado a cabo un proyecto de trabajo con menores y sus familias dentro del campo de la intervención social. De lo mucho aprendido durante estos meses se adivina una iniciativa que habría que potenciar en el futuro.

Este Espacio TORRECHICLÁN nace desde el descubrimiento de los nuevos problemas sociales que afectan a las familias más desestructuradas y, como consecuencia, a sus hijos, aprovechando toda la experiencia y buen hacer de la Colonia Urbana de Verano de Cáritas que había sido un referente imprescindible en los veranos de la ciudad durante más de 15 años. El espacio Familiar ofrece un espacio educativo tanto para padres como para niños de familias en situación de desventaja social, incidiendo en la dinámica familiar, partiendo de la implicación de la comunidad y buscando el compromiso voluntario en su desarrollo. Al mismo tiempo supone una experiencia de trabajo en red con entidades que intervienen con menores y sus familias, comenzando este año con las organizaciones coordinadas por Cáritas en el programa Caixa Proinfancia.

El trabajo se ha realizado tomando a la unidad familiar como punto de arranque de toda la intervención posterior; ya no es una intervención sólo con menores o sólo con los padres y madres; es una intervención integral con todos los miembros de la familia. A lo largo del verano se realizaron actividades con los niños, con las madres y padres y conjuntas, en las que se trabajaron diferentes aspectos: comunicación, higiene-salud, ocio-tiempo-libre, medio ambiente, habilidades parentales, organización del hogar y conocimiento de recursos sociales y culturales de la ciudad.

Han participado 33 menores de edades comprendidas de 0 a 12 años; 16 madres, de las que 10 forman familias monoparentales; han participado, además, 2 padres. La media de asistencia diaria a lo largo de los dos meses ha sido de 9 familias y unos 18 niños. Cuatro familias han asistido todos los días durante los dos meses de duración del Espacio TORRECHICLÁN.

La experiencia piloto realizada ha sido valorada positivamente tanto por las familias como por los agentes intervinientes, viéndose como un proyecto complementario a la labor que se realiza desde los ámbitos educativos (escuela y tiempo libre)) y sociales (servicios sociales y educación familiar). Uno de los grandes retos ha sido poder establecer unos ritmos de trabajo diario lo suficientemente flexibles para que se adaptaran y dieran respuesta a la realidad social, tan cambiante cada día, de las familias inscritas en el proyecto.

El trabajo realizado incide en tres ámbitos:
1. Trabajo integral con familias: observación, diagnóstico e intervención
2. Hacer posible la creación de espacios de relación, disfrute y fiesta.
3. Potenciar procesos de desarrollo comunitario y de compromiso voluntario

Esta experiencia tan enriquecedora, desarrollada en el barrio zaragozano de Torrero, ha sido posible gracias al trabajo desinteresado de 16 voluntarios, de la colaboración del colegio “El Buen Pastor” y del Stadium Venecia.

Además han participado en el buen desarrollo del proyecto el Centro de Tiempo Libre “El Trébol”, el Gabinete de Terapia Familiar, la Fundación ADUNARE, la Asociación “OS MESACHES” y la Asociación de Madres “Vía Láctea”, todos ellos participantes del Programa Caixa Proinfancia que coordina Cáritas en Zaragoza.

Curso "Educar la mirada" en el CPR "Juan de Lanuza"

Organizado por la Escuela de Formación y Voluntariado de Cáritas, y en colaboración con el CPR Juan de Lanuza, tendrá lugar el curso EDUCAR LA MIRADA: ANÁLISIS Y RECURSOS PARA TRABAJAR LA REALIDAD DE LA POBREZA Y EXCLUSIÓN EN EL AULA, durante los días 18, 20, 25 y 27 de noviembre. Esta dirigido a los profesores de educación infantil, Primaria y Secundaria.
A continuación el programa del curso:


06 octubre, 2008

En el Día Mundial para la Erradicación de la Pobreza

El día 17 de octubre se conmemora el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza que se recuerda cada año desde 1993, año de su declaración por la Asamblea General de las Naciones Unidas, con el propósito de promover una mayor conciencia sobre las necesidades para erradicar la pobreza y la indigencia en todos los países, en particular en los países en desarrollo, necesidad que se ha convertido en una de las prioridades del desarrollo.

(nota añadida a este post el día 17 de octubre de 2008):
Cáritas Diocesana de Zaragoza había programado un concierto para recaudar fondos destinados a sus diversos proyectos en favor de las personas excluidas en nuestra Diócesis, con motivo de este día internacional.

Por causas ajenas a Cáritas este concierto no pudo celebrarse; se emitió una comunicación de inmediato para avisar de la suspensión del concierto y se convocó a las personas que había pagado su entrada a la iglesia de San Nicolás para devolverles el importe. Ninguna persona aceptó el reembolso.

Desde estas páginas el agradecimiento más sincero de Cáritas a todas las personas que colaboraron.

Semana Cultural en la Residencia Santa Teresa de Cáritas

Como todos los años los mayores residentes en Santa Teresa nos invitan a un completo programa de actos con motivo de las fiestas, en Zaragoza, en honor de Nuestra Señora la Virgen del Pilar.
Aquí tenéis el programa:

03 octubre, 2008

“Claves teológicas para una intervención social humanizadora”





Ayer, 2 de octubre, en el salón de actos del Centro Pignatelli de la capital aragonesa, se celebró la sesión inaugural de los Cursos de Formación 2008-2009 de la Escuela de Formación y Voluntariado de Cáritas Diocesana de Zaragoza. En él acto participaron, el nuevo director de Cáritas, Carlos Sauras; el responsable de la Escuela de Formación y Voluntariado, Adolfo Lorente; y Vicente Giner, colaborador de Cáritas en tareas de formación de voluntarios y trabajador social implicado en el ámbito de la infancia excluida. La ponencia central dedicada al tema “Claves teológicas para una intervención social humanizadora”, corrió a cargo de Marta López Alonso, presidenta de la Asociación de Teólogas Españolas.



Marta López planteó su conferencia desde la oferta de unas claves teológicas, que puedan orientar nuestra intervención, dentro del campo de la Acción Social en Cáritas.
Profunda conocedora de los textos sagrados la ponente fue extrayendo citas que interpretó como claves para una intervención sanadora y humanizadora. Afirmaba que el Evangelio debe iluminar la realidad y nuestra acción: No podemos ir hacia los otros si no tenemos “agarrada nuestra propia vida”, no podemos “sin tener la fuente de agua viva de donde brota el Espíritu”.
Hoy tenemos delante de nosotros “personas encorvadas, que no pueden mirar de frente, a los ojos, de igual a igual, que no tienen perspectiva y, mucho menos, horizontes. ¿Podemos ayudarles a levantarse y a levantarnos, a enderezarnos?” .
Marta hacía también un llamamiento a la misión profética de los creyentes arraigada desde el bautismo. El profeta es el pone el dedo en la llaga, el que anuncia la palabra en tiempo de crisis, el que desvela la verdad quitando el velo de la mentira… Enumeró toda una serie de cualidades y adjetivos para ese personaje, más necesario que nunca, cuando parece que todo empieza a fallar.
Algunas de las frases pronunciadas por la teóloga tuvieron especial eco entre las gentes de Cáritas que asistimos al acto: “ Las claves de la Acción Social, en Cáritas, han de ser claves teológicas para despertar el hondo sentido del otro. Tenemos que plantearnos una nueva forma de estar en el mundo. Y hemos de preguntarnos desde lo más profundo ¿qué palabra tiene hoy Dios para el siglo XXI?. Porque la Acción Social de Cáritas es misión hacia los otros”.
“Atrevernos a contestar a preguntas tan serias como ¿quién soy? o ¿por qué y para qué estoy en este mundo?, atreviéndonos a descubrir la fuente interior, el espíritu, centrados en lo que realmente somos”, planteaba Marta en su brillante intervención.
Ser capaces de conjugar y entender el paso de la sensibilidad solidaria a la solidaridad evangélica, buscando, con los creyentes y no creyentes, el punto de encuentro que debe estar en la confluencia del amor al ser humano por encima de todo.
Terminó su intervención animándonos a denunciar las injusticias, a resistir activamente, poniendo una palabra alentadora, de consuelo, de compasión, siendo capaces de la indignación moral que, hoy por hoy, está muy dormida.